Golpes de calor

En el Servicio Veterinario del Hipódromo de San Isidro hemos desarrollado un protocolo de acción para los casos de distrés post carrera, también conocidos como golpes de calor.

Contamos con instalaciones de mangueras a lo largo del recorrido de regreso de los caballos desde la pista, que en muchas ocasiones es en donde comienzan a manifestarse algunos signos. Contamos con un dispositivo diseñado para dar frio con hielo a la zona de cabeza y cuello. Se les ofrece agua y electrolitos. Estas medidas a tiempo suelen ser suficientes para eliminar los síntomas en los casos leves.

Los cuadros más serios, suelen incluir mareos que pueden provocar la caída del animal. Incorporamos también una lona de gran tamaño para colocar al animal sobre la misma en caso de que caiga sobre superficies abrasivas. De esta manera, podemos trasladarlo hacia el pasto y evitar que se lastime en su incoordinación e intentos de pararse. Para evitar lesiones y para sacarlos rápidamente de ese estado, se incluye, aparte de las medidas mencionadas, medicación de rescate. Se ha desarrollado un protocolo de medicación teniendo en cuenta estudios realizados, nuestras propias experiencias y experiencias a nivel internacional de estos cuadros, que se dan en muchos lugares del mundo.

En todos los casos, luego de eliminados los síntomas, los caballos quedan en observación. Son retirados del servicio únicamente luego de un tiempo prolongado de caminata a la sombra y correcta hidratación. Aprovechamos desde el servicio para aconsejar a peones y cuidadores sobre qué medidas preventivas tomar en estos casos, y como evitar repeticiones de estos cuadros.

En los casos graves o reincidentes se suspenden para correr en las temporadas de calor, buscando de esta manera priorizar siempre el bienestar equino.